Los hábitos lleva tiempo cambiarlos. Hay que trabajar todos los días y estar muy concentrados en lo que se hace. Por eso es bueno ir de uno en uno. Intentar cambiar varios hábitos que no nos gustan, o no nos hacen bien, a la vez es muchísimo más difícil y hace que nos frustremos y decaiga nuestro ánimo.
Haz una lista de hábitos que quieras adquirir o de los que quieras cambiar. Numéralos de más difícil a más fácil. Y empieza por el primero, el más difícil. Cuando lo logres, que lo harás, todos los demás te parecerán sencillos y te sentirás genial contigo mismo.
Entrena tu pensamiento para que se concentre en ese hábito hasta que sientas que está incorporado a él. Hay que desearlo de verdad y visualizarlo. Sentirlo.
Dicen que al menos deben pasar veintiún días para que se convierta en algo que sale sin pensar, pero no te preocupes sino es así, tomate todo el tiempo que necesites y cuando ya lo tengas, pasa al siguiente de la lista.
No decaigas, aunque alguna vez no lo consigas. En vez de decir no puedo, háblate en positivo y di yo puedo con esto. Aprende de los errores generando pensamientos en positivo, no castigándote. No te pierdas en la queja. No funciona, vuelve a hacerlo de otra forma. Al final sabes que lo lograrás.
Puedes conseguir todo lo que piensas. El poder está en tu mente y en tus pensamientos. Son tus pensamientos los que dan forma a tu realidad, crean tu mundo. Cada persona crea su propia realidad. Porque no podemos controlar lo que pasa alrededor, pero si lo que pensamos sobre ello y lo que nos afecta.
Háblate con cariño, sé amable contigo mismo. Cree en ti. El discurso que tengas en tu interior creará realidades. Busca palabras que te ayuden. Te sorprenderás, porque tu vida será más feliz, más tranquila. Desaparecerán las energías negativas y te sentirás lleno de paz.
Inténtalo. De verdad, ¿Qué puede pasar, que no funcione? No habrás perdido nada. Pero te aseguro que sí funcionará y que lograrás llegar a donde te propongas.
Cuando logres tus hábitos, vivirás esa vida que siempre soñaste, plenamente y sin nada que te haga sentir vacío, estresado, furioso.
Si quieres contármelo aquí estaré.
No te rindas. No puedes cambiar el pasado, pero si lo que vayas a hacer hoy.